TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis (apro) .- El Instituto Nacional de Migración (INM), canceló la expedición de los oficios de salida del país y los traslados a la frontera norte de los miles de migrantes que se encuentran en la frontera sur de México, y que tenían una cita confirmada de solicitud de asilo ante el gobierno de Estados Unidos a través del programa CBP One.
Decenas de familias migrantes acudieron este martes a las oficinas de regularización del INM en Tapachula, buscando una respuesta del gobierno mexicano, solicitando que les permita transitar de manera segura por el país, para llegar a la frontera norte.
“Sabemos que no es culpa de migración de México, es la decisión que tomó Trump, pero les corresponde tomar acciones con las personas que estamos aquí; ya tenemos los pasajes comprados, tenemos cita aprobadas, hay niños, hay personas mayores, hay personas discapacitadas que necesitamos avanzar”, declaró la venezolana Jusmary Carrasquel.
El oficio de salida del país es otorgado por el INM a miles de migrantes, desde que la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que las personas sin documentos migratorios no podían permanecer más de 36 horas en las estancias, por lo que el INM prefirió entregarles un documento de salida y fijarles un plazo máximo de 30 días para que abandonen territorio mexicano con sus propios recursos.
Con lágrimas en los ojos, Yormelis Núñez, venezolana de 27 años de edad, dijo que lleva cuatro meses en Tapachula, “sufriendo con mi hija desde Venezuela, y no nos van a dar nada, ni permiso para subir; estamos sufriendo y esto no es justo, me siento mal”.
Desde agosto pasado, el INM habilitó un “corredor emergente de movilidad segura” desde Chiapas facilitando el traslado terrestre a los puertos fronterizos del norte de familias migrantes que contaban con una cita CBP One, pero el programa también fue suspendido.
Aunque desilusionados, las y los migrantes de distintas nacionalidades expusieron que buscarán la manera de seguir su camino hacia el norte en busca del sueño americano; platicaban sobre la posibilidad de armar una nueva caravana, otros también desengañados piensan volver a su país.
Diana Colmenares, comentó dejó a sus tres hijas en Venezuela, confiando en llegar a los Estados Unidos para poder ofrecerles una vida distinta a la que están viviendo en su país, pero ahora dijo que ve más difícil esa posibilidad.
“Nosotros lo que en realidad queremos, es que de verdad nos ayuden, aunque sea para continuar y seguir peleando allá arriba (en la frontera norte), eso es lo único que queremos, porque México ya no puede hacer nada, Migración tampoco, queremos subir para allá arriba a pelear con él (Donald Trump) a que él nos dé una oportunidad de entrar”, manifestó.
Con información de proceso.com.mx