Ha quedado a disposición de la Justicia argentina David Ezequiel Pereyra, otro de los cinco procesados en relación con la muerte del cantante británico Liam Payne, exintegrante del grupo musical One Direction, quien se cayó del tercer piso del hotel CasaSur de Buenos Aires a mediados de octubre.
El mismo Pereyra, de 21 años, se ha entregado luego de que rechazaran su pedido de exención de prisión, recoge el canal C5N.
Pereyra, empleado de CasaSur, es acusado de suministrarle estupefacientes al artista en las horas previas a su muerte. La investigación apunta a que, un día antes de la tragedia, Payne le pidió al joven "siete gramos más de lo que me diste ayer" a cambio de 100 dólares.
El intercambio se habría producido el 15 de octubre a las 03:25 horas de la madrugada en el ascensor del subsuelo del alojamiento, en un encuentro que fue registrado por una cámara de seguridad. De acuerdo con una causa radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N.° 34 de la capital argentina, la acción de Pereyra está catalogada por la Justicia como suministro de estupefacientes a título oneroso, señala el canal TN.
Su detención se suma a la del camarero Brian Paiz, de 24 años, el pasado 3 de enero, investigado por venderle cocaína dos veces al artista inglés el día que falleció. A ambos, señalados por la misma acusación, les han dictado prisión preventiva por suministro de drogas, además de un embargo por cinco millones de pesos (unos 4.860 dólares), según trascendió a finales de diciembre.
En la causa están siendo investigadas tres personas más: el empresario Rogelio Nores; la gerente del hospedaje, Gilda Martín, y el encargado del lugar, Esteban Grassi, todos imputados por el delito de homicidio culposo y embargados por 50 millones de pesos (unos 48.526 dólares).
Con información de actualidad.rt.com
Ayer, el presidente de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua, Álvaro Bustillos Fuentes, dio a conocer, en gira por el municipio de Gran Morelos, su intención de reelegirse para continuar al frente de esa asociación.
Bustillos Fuentes, quien acompañó a la gobernadora Maru Campos, en gira para la entrega de apoyos a productores de ese municipio, también dio a conocer los avances que se tienen en la adecuación de las estaciones cuarentenarias de Chihuahua, para que se reanude la exportación de becerros a los estados Unidos, suspendida el pasado noviembre, por el cierre de la frontera norteamericana tras detectarse gusano barrenador del ganado en Chiapas.
Además, informó, que ya se envió la solicitud al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), para que efectúe una supervisión sobre los trabajos realizados para adecuar las instalaciones de las estaciones cuarentenarias al nuevo protocolo sanitario, objetivo para el que invirtieron más de 20 millones de pesos, para que se permita la reapertura de la frontera norteamericana.
Luego de esa supervisión, vendrá la revisión que realice el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, para aprobar las adecuaciones al protocolo de sanidad y se logre reabrir la frontera a la exportación de becerros hacia ese mercado.
Ayer, el presidente de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua, Álvaro Bustillos Fuentes, dio a conocer, en gira por el municipio de Gran Morelos, su intención de reelegirse para continuar al frente de esa asociación.
Bustillos Fuentes, quien acompañó a la gobernadora Maru Campos, en gira para la entrega de apoyos a productores de ese municipio, también dio a conocer los avances que se tienen en la adecuación de las estaciones cuarentenarias de Chihuahua, para que se reanude la exportación de becerros a los estados Unidos, suspendida el pasado noviembre, por el cierre de la frontera norteamericana tras detectarse gusano barrenador del ganado en Chiapas.
Además, informó, que ya se envió la solicitud al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), para que efectúe una supervisión sobre los trabajos realizados para adecuar las instalaciones de las estaciones cuarentenarias al nuevo protocolo sanitario, objetivo para el que invirtieron más de 20 millones de pesos, para que se permita la reapertura de la frontera norteamericana.
Luego de esa supervisión, vendrá la revisión que realice el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos, para aprobar las adecuaciones al protocolo de sanidad y se logre reabrir la frontera a la exportación de becerros hacia ese mercado.