BRUSELAS, Bélgica (apro).- Organizaciones civiles mexicanas se reunieron con representantes en el área de derechos humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de la Unión Europea para exponer la preocupación ante la desaparición de órganos autónomos, como el Instituto Nacional de Acceso a la Información, además de la reforma judicial y las crisis por desplazamiento forzado, desapariciones y avances de los grupos criminales en territorios del país como Chiapas y Sinaloa.
En el desarrollo del XII Diálogo de Alto Nivel sobre Derechos Humanos entre la Unión Europea y México y el X Seminario de las Organizaciones de la Sociedad Civil de ambas partes, participaron Olof Skoog, representante especial de Derechos Humanos de la UE, y Enrique Ochoa, subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE, así como nueve organizaciones mexicanas junto con dos periodistas y dos defensores, mientras que por la UE fueron 12 entes civiles quienes asistieron.
Entre los temas expuestos figuran la violencia de género, los desplazamientos en varios estados, la crisis por desapariciones y lo que ello conlleva en materia forense y de búsqueda, además de los desafíos en materia de acceso a la justicia por el alto índice de impunidad que caracteriza a México.
La presencia del crimen organizado y las inversiones extranjeras en zonas donde hay violaciones a los derechos humanos o se afecta el ecosistema, además de las agresiones a periodistas y defensores, como el homicidio al sacerdote Marcelo Pérez, fueron otros de los planteamientos.
“Con el proyecto político en el poder se ven oportunidades relevantes para seguir avanzando en derechos sociales, como la reducción de la pobreza y la desigualdad que ocurrió en el sexenio pasado; mejoras en derechos laborales y ahora, en particular con la nueva administración de la presidenta Claudia Sheinbaum, existe la oportunidad de tener avances en materia ambiental y de derechos de las mujeres.
“Lamentablemente en materia de derechos civiles y políticos el panorama no es alentador y hay alarmas relevantes. La gran amenaza que enfrenta la frágil democracia mexicana sigue siendo el control territorial que detentan las organizaciones criminales en diversas regiones del país, como recientemente se ha visto en Chiapas y Sinaloa”, señaló Eduardo Guerrero, representante del Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez.
Expresó que hay cuatro aspectos en los que se pudiera resumir el contexto de la crisis en derechos humanos.
El primero, lo relacionado con la violencia que se representa en homicidios y desapariciones; luego el empoderamiento militar que ha llevado, mediante cambios legales, a la participación de estas instituciones en actividades no relacionadas con la seguridad; le sigue la impunidad y el deterioro del espacio cívico por los cuestionamientos desde el gobierno hacia la sociedad civil, la prensa y organismos internacionales.
Tras escuchar a los ponentes de las organizaciones civiles de México y la Unión Europea, quienes presentaron varias peticiones, los representantes gubernamentales coincidieron que se debe preservar un entorno de seguridad para el ejercicio periodístico y la defensa de los derechos humanos.
“Los diálogos no son necesariamente un ejercicio fácil. Se supone que no deben serlo entre socios fuertes con ideas afines como México y la UE. Estos diálogos implican, ciertamente, un grado de escrutinio sobre los avances y las deficiencias, pero también deben ser colaborativos y una forma de acompañarnos unos a otros para hacerlo mejor”, expresó Olof Skoog, quien dijo que le preocupa mucho la situación de los defensores y periodistas.
Por su parte el subsecretario Enrique Ochoa dijo que México se encuentra en un proceso de transformación que busca corregir las injusticias históricas, como lo mencionó la presidenta Sheinbaum en la Cumbre realizada en Río de Janeiro el mes pasado, para llevar la inclusión, igualdad, la democracia y la justicia “a ámbitos que no habíamos imaginado” con tres reformas constitucionales como son la Judicial, el reconocimiento de la igualdad sustantiva de las mujeres y el reconocimiento como sujetos de derecho a los pueblos y las comunidades indígenas y afroamericanas.
“Estas reformas tienen como objetivo avanzar hacia una sociedad más justa con mayor y mejor acceso a la justicia para todos, combatiendo la corrupción y las redes de intereses creados. En ese contexto, la colaboración y cooperación con la Unión Europea es imprescindible para avanzar de manera conjunta en el desarrollo de nuestras respectivas sociedades desde una perspectiva integral enfatizando, por supuesto la protección de los derechos fundamentales especialmente en los grupos vulnerables”, dijo.
Agregó que junto con la Unión Europea trabajarán en el interés mutuo de reducir la violencia generada por temas de lavado de dinero y fabricación de armas.
Entre las organizaciones mexicanas que participaron en estas actividades se encuentran Amnistía Internacional, Centro de Información de la Mujer, Article 19, Centro Proh, Centro Fray Bartolomé de las Casas, Serapaz, Tejiendo Redes Infancia en América Latina, Poder, mientras que la contraparte europea fue Eulat Network, Taula per Méxic, Plataforma por la Paz, Protect Defenders, entre otras.
Con información de Proceso.