La presidenta y fundadora de la asociación “Que se escuche fuerte mi grito” Mayté Herrera, dijo a Omnia – La Conversación que, en el tema de las autolesiones o “cutting” que ocurre y que es tan común en niños de sexto año y de secundaria, muchas veces los papás se tardan años en enterarse, porque lo hacen en lugares en donde no se ven o se aprecia.
Hay padres que no tienen idea de que eso pasa y que, necesariamente no significa un intento suicida, pues hay muchas conductas autolesivas que no tienen esa intención, sino que, los jóvenes no pueden lidiar con la crisis que traen en su mente, pero sí pueden hacerlo con el dolor físico.
Señaló que la autolesión les da una liberación de endorfinas, que les calma lo que traen en su cabeza, que no lo pueden controlar, sin embargo, sí pueden hacerlo con el dolor de unas cortadas, según piensan.
Si como papá me doy cuenta que mi hijo se está cortando, pierdo la cabeza y pienso que lo tengo que internar, eso se dice, sin embargo, no hay que proceder así, pues lo que hay que hacer es sentarse a platicar con tu hijo, preguntarle qué está pasando y por qué lo está haciendo, sin regañarlo, porque esta problemática es más común de lo que creemos, señaló.
Según dijo, se trata de una forma que tienen de tranquilizarse y realmente hay una explicación física por la liberación de endorfinas, pero lo mejor que hay que hacer, es ayudarles a buscar de qué manera pueden liberarlas de manera sana.
Si no existe esa comunicación y si en la escuela no se está hablando de este tema, pues debería platicarse sobre las autolesiones en la secundaria.
Las autolesiones, son más comunes de lo que parece, pues comenta que le tocó el caso de una secundaria en Michoacán, donde madres preocupadas porque una de las alumnas platicó que sus amigas se “cortaban”, empezaron a investigar y de dos salones de ese nivel educativo, con 50 alumnos, 38 tenían esa práctica.
La especialista señaló que en Delicias está la fundación Acap, que hacen tamizajes en la secundarias y preparatorias y salen algunos números bastante altos, de jóvenes que se autolesionan.
Por eso dijo hay que despertar como comunidad y hacer una conciencia colectiva, de que las entidades solas no lo van a poder resolver esta problemática, si no se involucra a la familia, afirmó.