Las principales organizaciones sindicales de México han manifestado su rechazo a la reciente reforma Infonavit aprobada en el Senado. Los sindicatos más representativos, como la CTM, la CROM y la ASPA, advierten que este cambio en la estructura del Instituto pone en peligro la transparencia y el control de recursos destinados a la vivienda de los trabajadores, que ascienden a 2.4 billones de pesos.
Una de las principales preocupaciones de los sindicatos es la modificación del esquema tripartito que ha regido al Infonavit durante décadas. Hasta ahora, el gobierno, los trabajadores y los empleadores compartían de manera equitativa la representación en los comités del Instituto. Sin embargo, con la reforma, el gobierno federal obtendría una mayoría de votos en los comités de vigilancia, auditoría y transparencia, reduciendo significativamente la presencia de los representantes de los trabajadores y empresarios.
Los comités de vigilancia, que antes contaban con nueve integrantes, ahora serán doce, con una notable modificación: el gobierno tendría cinco representantes, mientras que los sectores de trabajadores y empresarios solo compartirían dos. Este cambio ha sido calificado como una vulneración al principio de participación tripartita, que históricamente ha garantizado una gestión más equitativa y transparente del Infonavit.
La CTM hizo un llamado al diálogo entre el gobierno y los sindicatos. A pesar de apoyar la política de vivienda del gobierno, Salgado expresó que es fundamental establecer un proceso de consulta con los trabajadores antes de aprobar reformas que afecten directamente sus derechos.
Rodolfo González, líder de la CROM, subrayó que la reforma no solo disminuye la participación de los trabajadores, sino que también crea un instituto externo para manejar los fondos, lo que genera preocupación sobre la opacidad en la administración de estos recursos. En este sentido, González anunció que presentarán una queja ante el Comité de Normas de la OIT, al considerar que la reforma fue realizada sin consultar adecuadamente a los trabajadores.
Las organizaciones sindicales han solicitado una revisión exhaustiva de la reforma, exigiendo que se garantice la participación equitativa de los tres sectores en los órganos decisionales del Infonavit. En su opinión, un desequilibrio en la representación podría convertir las decisiones en una imposición unilateral, afectando la transparencia y el correcto manejo de los recursos destinados a la vivienda de los trabajadores.
Este rechazo se suma a una creciente preocupación por el futuro de la política de vivienda en México, especialmente en lo que respecta a los mecanismos de control de recursos y vigilancia, que hasta ahora han sido una garantía para los trabajadores.
Con información de Crónica.