EF Education First (EF), proveedor global de educación inmersiva, publicó la edición 2024 de su Índice de Dominio del Inglés EF (EPI), la encuesta internacional más grande de habilidades de inglés por países, capitales y regiones, y que se publica anualmente desde 2011.
Por sexto año consecutivo, Países Bajos mantiene el primer lugar del índice, seguido por Noruega y Singapur, mientras que Surinam es el país con mejor desempeño en América Latina, ocupando el puesto 27 a nivel global. Por su parte, México subió 2 posiciones pasando del lugar 89 de 113 países en 2023, al 87 de 116 países este año, pero continúa con un nivel de competitividad muy bajo volviendo a ocupar por tercer año consecutivo, el penúltimo lugar en Latinoamérica (459 puntos) para ubicarse una vez más por arriba de Haití y debajo de Ecuador únicamente.
En general, el índice EPI 2024, calculado a partir de los resultados de prueba de 2.1 millones de personas no nativas de habla inglesa, mayores de 18 años, en 116 países y regiones, informa un declive lento pero persistente de la competencia en inglés a nivel mundial, donde los hombres siguen siendo más competentes que las mujeres, y los jóvenes profesionales más competentes que los estudiantes y los adultos mayores de 40 años.
Kate Bell, autora del índice, explica a El Economista que México tiene una posición estable, pero sin mucha evolución en su nivel de inglés, en contraparte, la región mejora y el país no sigue esta tendencia, por eso nos hemos quedado en las últimas plazas. La lectura que se le puede dar a esto también, es que no es una prioridad en nuestro país, que no hay financiamiento para desarrollar estrategias o no se ha buscado generar el ecosistema adecuado.
“La estabilidad que presenta el país en realidad es con un nivel bastante bajo esto puede ser penalizado a la hora de buscar colaboraciones con Estados Unidos u otros países que necesitan el inglés para trabajar y que haya más oportunidades. Sabemos que el español de facto abre oportunidades económicas con otros países que comparten la lengua, pero el inglés abre más puertas geográficas, además sabemos que México no sólo está interesado en intercambiar con países de Latinoamerica”.
La especialista explica que en México vemos que hay estados que mejoran más que otros, “esto podría ser una pista para voltear a verlos y entender qué hacen diferente y poder copiarlos”. Las diferencias de puntuación entre la mejor y peor ciudad son de 236 puntos, y entre los estados, de 160 puntos, lo que indica una desigualdad significativa en la educación en inglés.
En el Top 5 de estados, están: Nuevo León, Jalisco, Colima, Sinaloa y Morelos; quedando fuera este año Querétaro y Michoacán. Ahora son 14 los estados que tienen un nivel muy bajo (antes eran 13). Baja California, Tlaxcala, Campeche, Hidalgo, Estado de México y Coahuila son los peores rankeados. Por su parte, Monterrey, Hermosillo, Chihuahua, Morelia y Cuernavaca son las ciudades mejor calificadas; quedando fuera en esta edición Guadalajara y León esta última con gran descenso. Las ciudades peor calificadas este año son: Ciudad Juárez, Toluca, Durango, Saltillo y Valladolid.
También en países como el nuestro, las personas que trabajan, que están por arriba de los 25 años, son los que han mejorado, “así que deducimos que el país mejora por los adultos y no por los jóvenes”. Aunque parecería que el sistema educativo es el que tiene la responsabilidad de contribuir en la mayoría de las competencias en inglés, realmente esto no pasa; esto nos da otra pista de cómo son ellos mismos (los adultos), quienes están buscando mejorar su nivel de inglés aunque el nivel sigue bastante igual y no mejora comparado con otros países.
“La realidad es que el inglés es una competencia muy pedida en el mundo laboral, en otros países las empresas forman más a sus empleados y hay bolsas dedicadas a esto, porque hay una motivación enorme por mejorar el idioma, pues eso significa mayores oportunidades para los profesionales y las empresas. La motivación está, no es necesario decirle a la gente que el inglés es importante, pero puede faltar tiempo, dinero, o medidas eficaces para desarrollar el inglés, en este papel las empresas pueden tener un rol muy importante para buscar la formación de sus empleados”.
Dijo que esta es una estrategia inmediata, “porque aunque a la par se podría estar mejorando el idioma para los menores, los resultados se verán en unos 15 a 20 años, esto es de gran importancia, pero para tener un impacto real en el corto plazo, se deben seguir proyectando programas para adultos, quienes además tienen mayor motivación para desarrollar el idioma. Son diversas las estrategias para llegar a todas las poblaciones con diferenciadores”.
Agregó que en este sentido las empresas tienen su papel, pero también el Estado tiene un papel en la formación de adultos, “hay muchos países que dedican horas y presupuesto para que sus adultos consigan la competencia del inglés para ser utilizada directamente en sus labores”.
Bell asegura que también el aprendizaje de idiomas ha cambiado de 20 años para acá, “nos hemos enfocado mucho más en qué podemos hacer con el idioma, que en el idioma tal cual. Por eso hoy no estudiamos tanto la gramática, sino las aplicaciones, esto no quiere decir que no hay que memorizar vocabulario, o entender cómo funciona la gramática, pero sí se busca la aplicación de forma prioritaria”.
Agrega que con la inteligencia artificial vamos a tener la posibilidad de un aprendizaje mucho más personalizado, “al servir como una especie de asesor en el aprendizaje del idioma, además de asistirnos en la redacción y la comprensión de textos, el mundo de los idiomas se va a transformar”.
Por último, dijo que el gran secreto para desarrollar el idioma, seguirá siendo la práctica. “Lo mejor será poder utilizar el idioma en el trabajo, en correos, a distancia, o en persona, leer artículos, guías, seguir conferencias; la importancia no estará en la exactitud gramatical sino en la funcionalidad. Los países que tienen un muy buen nivel de inglés son aquellos que tienen un contacto cotidiano, que el inglés está presente en su vida, se utiliza en el trabajo, para hablar con colegas, se consumen medios de información y es parte de su vida regular, la penetración del idioma en la vida cotidiana es importante y esto es lo que tiene que desarrollar el adulto que quiera seguir creciendo en el idioma”.
El estudio se puede consultar en: https://www.ef.com.mx/epi/
Con información de El Economista.