Freddie Freeman, primera base de los Dodgers que fue elegido como Jugador Más Valioso (MVP) de la Serie Mundial tras imponerse 4 juegos a 1 a los Yankees, dedicó el título de las Grandes Ligas al lanzador mexicano Fernando Valenzuela, quien falleció la semana pasada.
Freeman reconoció que el triunfo en la Serie Mundial fue muy significativo tras la pérdida del pitcher mexicano, alguien a quien aprendió a admirar gracias a su familia.
“Es difícil ponerlo en palabras. Mi madrastra es de Los Ángeles. Ella creció viendo a Fernando... lo que significa Fernando en la ciudad de Los Ángeles; y no sólo en Los Ángeles, sino para los aficionados al beisbol en todo el mundo”, dijo Freddie Freeman.
"Él trajo la 'Fernandomanía' y fue eléctrico. Yo no estaba vivo para ver eso, pero ver lo que significó para tanta gente, estar cerca de él los últimos tres años...".
El pelotero reveló que cuando tenía 10 años de edad su madre falleció por cáncer, pero ella le heredó la admiración por Fernando Valenzuela, por lo que espera ambos ‘celebren’ juntos esta victoria.
“Me gustaría que (Valenzuela) estuviera aquí. Me alegro de que él está ahí arriba probablemente con mi mamá saltando de arriba a abajo en este momento. Así que me alegro que lo hayamos podido traer a casa (Trofeo del Comisionado). Un poco agridulce, pero me alegro que fuéramos capaces de hacerlo por Fernando y su familia”, sentenció Freddie Freeman.
MVP
Freeman conectó uno de los cuadrangulares más dramáticos en la historia del Clásico de Otoño y redondeó una actuación personal épica para ganar el Premio Willie Mays al Jugador Más Valioso (MVP) de la Serie Mundial.
Hizo historia en la décima entrada del Juego 1 con el primer Grand Slam de oro en la historia de la Serie Mundial. Y luego no paró la marcha.
En solo cinco juegos, Freeman impulsó 12 carreras, igualando el récord de una Serie Mundial establecido por Bobby Richardson de los Yankees en 1960 (en siete juegos). Conectó jonrones en cada uno de los primeros cuatro juegos del Clásico de Otoño, uniéndose a George Springer de los Astros (2017) como los únicos jugadores en batear cuadrangulares en cuatro juegos seguidos en una sola Serie Mundial. Al hacerlo, extendió su racha personal de jonrones en la Serie Mundial a seis, remontándose a 2021. Su línea final en la Serie Mundial fue una impresionante .300/.364/1.000.
Esto culminó un año emotivo para Freeman, quien se perdió ocho juegos durante la temporada regular mientras su hijo de tres años, Max, luchaba contra el síndrome de Guillain-Barré, un grave trastorno autoinmune.
Con información de Latinus