Senadora Cynthia López explica su ausencia en la votación de la reforma de supremacía legislativa: "Me bajó la presión y no pude regresar a tiempo"

La senadora priista Cynthia López Castro justificó su ausencia durante la votación que se llevó a cabo la madrugada de este viernes en la Cámara Alta, con la que se aprobó la reforma sobre supremacía legislativa, asegurando que “no me sentí bien, se me bajó la presión, me salí”, por lo que ya no pudo regresar a tiempo.

A través de un video difundido este sábado, la legisladora se dirigió a la opinión pública para ofrecer disculpas por no haber votado, pero enfatizó que su ausencia no fue determinante en el resultado. 

“Mi voto no hizo la diferencia, no le dio la mayoría calificada a Morena”, subrayó, y explicó que con 126 senadores presentes, el oficialismo necesitaba 84 votos para aprobar la reforma, que se avaló por 85 votos a favor, lo que significa, afirmó, que incluso si ella hubiera estado presente, su voto no habría cambiado el curso de la votación.

La senadora se mostró firme al rechazar las acusaciones de traición a su partido y a la ciudadanía, aclarando que no se vendió ni llegó a ningún acuerdo con Morena. “No voy a permitir que estén mal informando a la gente ni haciendo fake news sobre lo que ocurrió”, aseguró.

López Castro concluyó su mensaje solicitando el apoyo de su coordinador y su grupo parlamentario, mientras se prepara para las próximas sesiones legislativas. “El martes seguiremos trabajando, votando a favor de las reformas que beneficien a México y en contra de las que no compartamos”, afirmó.

Durante la sesión del jueves que se extendió hasta la madrugada del viernes, la senadora priista participó en tribuna en contra de la reforma a los artículos 105 y 107 de la Constitución, con la cual Morena busca impedir que se promuevan acciones de inconstitucionalidad, amparos y controversias contra reformas constitucionales. 

Previo a su participación, a López Castro se le vio conversar con el coordinador de Morena, Adán Augusto López, lo que despertó sospecha sobre si se integraría a su bancada, máxime de que se ausentó durante la votación de la reforma.

Con información de

Latinus.us

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En esa comparecencia, fueron muy fuertes las críticas en contra de la titular de la CNDH, de la que dijeron se ha negado a emitir alguna recomendación, en el 99 por ciento de las quejas, en contra la Guardia nacional y la Sedena.

Otra, más, fue por su negativa a reconocer la militarización en el país, de la que dijo, no existe porque hay un mando civil, para echarle luego toda la culpa al sexenio Felipe Calderón.

Y no solo eso, organizaciones de la sociedad civil se oponen a su reelección, en vista de la nula cooperación que ha tenido, así como con los colectivos de madres buscadoras, entre otras asociaciones.

Además, habría que recordar la injerencia que ha tenido en cuestiones electorales, con un claro interés partidista hacia la 4T.

No obstante, dicen que, pese a todas las críticas y el mal desempeño, del que señalan, ha sido sumiso y de complicidad, parece ser que se le premiará esa subordinación al oficialismo, defendiendo al gobierno y dejando de lado a la víctimas, con otro periodo más al frente de la CNDH.

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