PACHUCA, Hgo.– (Proceso).– La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) demandó por 430 millones de pesos a Grupo Financiero HSBC por la disminución de intereses en dos cuentas, una de inversión en pesos y otra maestra en dólares, debido a un cambio de tasa que acusó arbitrario, así como por la pérdida cambiaria (de dólares a pesos) durante el periodo en que las cuentas de la casa de estudios estuvieron congeladas por orden de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) por presuntos movimientos inusuales en el extranjero.
En la demanda mercantil, a la que Proceso accedió, la UAEH acusó a HSBC de incumplir un “contrato de depósito bancario de dinero a la vista personas morales, en moneda nacional”, que firmaron en la Sucursal 0082 de Pachuca el 26 de enero de 2011, y del cual pactaron los intereses el 17 de enero de 2019.
La suma que la universidad exige corresponde al pago de dichos intereses en un periodo que comprende del 5 de enero de 2020 al 17 de mayo de 2022, la cual, afirmó, asciende a 255 millones 310 mil 61.44 pesos.
La defensa legal de la universidad argumentó que su cliente no fue notificada de “modificación alguna a la tasa de interés pactada en el citado contrato”, el cual, añadió, “no se pueden dejar al arbitrio de uno de los contratantes”.
HSBC hizo válida una cláusula, la sexta del contrato, de la cual la UAEH pide la invalidez. A la letra, este considerando dice que “el banco se reserva el derecho de efectuar modificaciones a los términos y condiciones de este instrumento, así como de revisar y ajustar en cualquier tiempo los montos y saldos mínimos de los depósitos, las tasas aplicables, los rangos de los saldos y las comisiones a cargo del cliente, previo aviso que de manera general le dé con la debida anticipación a que entren en vigor, en un plazo no menor a 30 días naturales”.
De igual manera la casa de estudios recriminó el incumplimiento de otro contrato de dinero “a la vista en dólares”, firmado el 11 de agosto de 2006 en la misma sucursal, así como el “acuerdo de voluntades de 17 de enero de 2019, respecto de la tasa de interés pactada”. El dinero que demanda también corresponde al lapso del 5 de enero de 2020 al 17 de mayo de 2022, y lo valúa en 47 millones 442 mil 899.65 dólares.
También reclamó que “no se notificó modificación alguna a la tasa de interés pactada en el citado contrato”, y pide la invalidación, en este caso, de la cláusula décima, que refiere lo siguiente sobre modificaciones: “Los términos y condiciones previstos en este contrato, las tasas de rendimiento, así como el monto absoluto o relativo de los cargos por cuotas, comisiones, intereses ordinarios o moratorios, o por cualquier otro concepto, podrán modificarse por HSBC en todo tiempo mediante aviso escrito que dé al cliente con diez días hábiles de anticipación a la fecha en que las modificaciones deban entrar en vigor”.
Con base en la demanda, los intereses acordados entre HSBC y la UAEH fueron de 8.55% anual respecto de la cuenta en moneda nacional y de 2.90 % por la cuenta de inversión en dólares americanos.
Congelamiento de cuentas
Por este acuerdo de rendimientos, la universidad transfirió el 17 de enero de 2019 a HSBC los recursos que tenía en el extranjero con el banco Credit Suisse, cuya principal sede se encuentra en Zúrich, Suiza.
El 22 de febrero de aquel año la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ordenó el congelamiento de diversas cuentas bancarias que la Autónoma de Hidalgo tenía abiertas en varias instituciones, dentro de las cuales se incluyeron seis con HSBC, por presunto lavado de dinero.
Ese acuerdo de la UIF, entonces a cargo de Santiago Nieto Castillo, 33/2019, posteriormente fue sustituido por el acuerdo 71/2020 del 25 de mayo de 2020, el cual incluyó una alerta del Departamento del Tesoro de Estados Unidos por movimientos inusuales en el extranjero por parte de la institución educativa.
Al momento de la inhabilitación, la cuenta en moneda nacional tenía dos mil 271 millones 242 mil 454.63 pesos, mientras que la de monera extranjera contaba con 33 millones 491 mil 878.40 dólares, según las especificaciones de la demanda.
La universidad igualmente pidió el pago de la cantidad que por concepto de daños y perjuicios se cuantifique en ejecución de sentencia, por la afectación “directa e inmediata” que, aseveró, le causó el banco por lo que juzgó como una “indebida retención” de la cantidad de 34 millones 534 mil 84.81 dólares, entre el 18 y el 24 de mayo de 2020, así como el pago de los gastos y costos que se generen por el presente juicio hasta su conclusión.
Lo anterior, porque reclamó que en la primera fecha, el 18 de mayo, HSBC fue notificado por el Segundo Tribunal Colegiado del Vigésimo Noveno Circuito de una resolución por la que debería liberar las cuentas de la UAEH, pero no lo hizo de inmediato.
La denuncia refiere que el 20 de mayo de 2020 el entonces rector Adolfo Pontigo Loyola, en compañía de la contadora Luz María Vigueras Melo, directora de Tesorería de la Autónoma, “se constituyeron en las oficinas de la demanda HSBC México, SA, Institución de Banca Múltiple, Grupo Financiero HSBC, Sucursal 0082 ‘Pachuca’, para requerir de forma personal la entrega de los recursos económicos que tenían las cuentas bancarias que el Tribunal Colegiado ordenó que fueran desbloqueadas, entrevistándose con el funcionario bancario Pedro D.G., quien les informó que había recibido el oficio 6310, del Segundo Juzgado de Distrito en el expediente 231/2019, y que el trámite de desbloqueo estaba en curso, pero que por el momento no era posible entregarles los recursos económicos, hasta en tanto le informaran de sus oficinas centrales de CDMX, que ya habían sido liberadas las cuentas”.
Al no liberarlos al instante, la universidad no pudo retirarlos y, como consecuencia, quedaron congelados de nuevo con el nuevo acuerdo de bloqueo, 71/2020 del 25 de mayo.
El banco argumentó que el dinero fue liberado el domingo 24, pero para el retiro debía acudir la autoridad universitaria al siguiente día, que era hábil, de acuerdo con un correo electrónico enviado al entonces rector y a la encargada de Tesorería.
Al llegar a la sucursal, al exrector le notificaron que ese mismo 25 de mayo, a las 9 horas, las cuentas habían sido aseguradas nuevamente por orden de la UIF.
En ese último monto, los 34.5 millones de dólares que no pudieron retirar, se centra el tercer componente de la demanda: “La pérdida cambiaria de dólares a pesos”, que la institución educativa cuantificó en 133 millones 738 mil 303.33 pesos desde el 18 de mayo de 2020 en el que se congeló, por segunda ocasión el dinero, hasta la liberación de la cuenta maestra en dólares el 17 de mayo de 2022.
Acusan arbitrariedad
En entrevista telefónica con Proceso, el rector de UAEH, Octavio Castillo Acosta, dijo que no hubo un argumento del banco para reducir la tasa de interés, “actuó de manera arbitraria aprovechando ventajosamente la acción de la UIF”. Asimismo sostuvo que el bloqueo del capital ordenado por la investigación no condicionaba los rendimientos del dinero porque “cuando se genera la inversión hay un contrato y el contrato ampara tanto el monto como el interés”.
También insistió en que la UIF nunca notificó de la acción por presunto lavado de dinero que realizaba contra la universidad. “El banco tampoco, aunque después se dijo que sí existía un documento. La universidad lo pidió y no lograron acreditarlo”, y que la manera en la que tuvieron conocimiento que algo había sucedido con sus cuentas fue porque intentaron hacer transacciones y el recurso estaba congelado.
Aunque Inteligencia Financiera aseguró que con el bloqueo no se puso en riesgo la operatividad de la UAEH, Castillo Acosta –que en aquel momento era secretario general del Sindicato de Personal Académico– afirmó que fue afectado el fondo de jubilaciones y a estudiantes “al limitar el número de becas”.
En aquel entonces, la UIF argumentó el requerimiento del Departamento de Estado de Estados Unidos para congelar las cuentas, el rector sostiene: “en ningún momento la Unidad de Inteligencia Financiera acreditó esa petición de la DEA”, en relación también a un señalamiento de delitos relacionados con hidrocarburos, pero aseguró que a esta fecha no tiene “ninguna averiguación en ese sentido; ningún procedimiento legal”.
En su posición contra HSBC, la universidad expuso que de 2005 a 2007 el banco facilitó ocultar más de cien mil millones de dólares sin declarar, de más de cien mil clientes en Suiza, argumentando fallas en su filial, y con ello sugirió un actuar indebido. El recurso que fue congelado a la UAEH también provenía de Suiza. Asimismo la institución educativa dijo que, tras cuatro años, no se ha concretado la devolución de los tres mil millones de pesos que fueron motivo de bloqueo por el presunto blanqueo, aunque insistió en que están libres de cualquier proceso ante las autoridades mexicanas y estadunidenses.
HSBC, por su parte, dijo a Proceso que no tiene una posición sobre el caso con la UAEH, tampoco por las acusaciones que los directivos universitarios han hecho nuevamente contra el banco, en un caso que tiene como origen el congelamiento de activos por la investigación de Inteligencia Financiera, que acusaba probable lavado. Seguirán el proceso por la vía legal.
Con información de Latinus