Claudia Sheinbaum y Dilma Rousseff hicieron historia al convertirse en las primeras mujeres en dirigir las dos economías más importantes de América Latina, México y Brasil respectivamente, sin embargo, sus similitudes van más allá de este hito: ambas capitalizaron la popularidad de sus antecesores y los programas sociales que ellos implementaron para ganar adeptos y promoverse como las presidentas de la continuidad.
Rousseff, quien fue mandataria entre 2011 y 2016, aseguró al inicio de su gobierno que su "lucha más obstinada será por la erradicación de la pobreza extrema y la creación de oportunidades para todos", por lo que iba a continuar con la obra de su antecesor, Luiz Inácio Lula da Silva, teniendo una especial atención en los programas sociales.
Por su parte, la recién asumida como presidenta de México, dijo en su discurso de investidura que impulsará los programs sociales creados durante la administración del mandatario saliente, Andrés Manuel López Obrador, así como la instalación de otros tres programas: uno que apoya a las mujeres, otro que ayudará a estudiantes y uno más para los adultos mayores.
Además, durante sus discursos inaugurales, hicieron referencia a sus antecesores, de quienes elogiaron su trayectoria y administración.
Admiración por sus antecesores
Rousseff, qquien fue presa política durante la dictadura en Brasil, hizo su campaña electoral literalmente de la mano de Lula y el 1 de enero de 2011 destacó que Da Silva fue "un presidente que mudó la forma de gobernar y llevó al pueblo brasileño a confiar todavía más en si mismo y en el futuro del país".
Por su parte, Claudia Sheinbaum aseguró que López Obrador es "el dirigente político y luchador social más importante de la historia moderna", lo comparó con Lázaro Cárdenas y aseguró que "estará siempre en el corazón del pueblo de México".
Ambas mandatarias dijeron que fue un orgullo haber participado en los proyectos de sus antecesores.
La brasileña era afiliada al Partido de los Trabajadores (PT) y durante el mandato de Lula ocupó los ministerios de Minas y Energía, y después fue su jefa de gabinete.
Sheinbaum es militante fundadora de Morena, y durante la administración de López Obrador como jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal, fue la titular de la Secretaría de Medio Ambiente, y cuando se efectuó el supuesto fraude electoral en 2006 y se instaló el "gobierno legítimo", el expresidente la nombró titular de la Secretaría de Defensa del Patrimonio Nacional.
Tanto la presidenta de México como la exmandataria brasileña dedicaron buena parte de sus discursos para celebrar el logro de que una mujer llegará al máximo puesto en el Ejecutivo de cada país.
Rouseff subrayó su "compromiso supremo" de "honrar a las mujeres, proteger a los más frágiles y gobernar para todos", mientras que Claudia Sheinbaum aseguró que "es tiempo de transformación y es tiempo de mujeres".
Da Silva fue presidente del 2003 al 2007 y fue reelecto para un segundo mandato hasta el 2011, que fue cuando Rouseff lo sucedió en el cargo, en el que se mantuvo hasta el 2016.
Con información de Latinus