Una comisión de los padres y madres de familia de los 43 normalistas de Ayotzinapa acudieron a la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) para expresar las exigencias de su lucha a 10 años de la desaparición de sus hijos en Iguala, Guerrero.
En el recinto se recordó que hace una década Iguala vivió una noche de pesadilla con la desaparición de los 43 normalistas, el asesinato de Julio César Mondragón, Daniel Solís Gallardo y Julio César Nava y la agresión con arma de fuego de Aldo Gutiérrez, quien continúa con complicaciones derivadas del impacto.
“Hoy, a una década, tampoco tenemos justicia para los compañeros que fueron asesinados por elementos de las corporaciones policiacas en colaboración con el crimen organizado, tampoco tenemos justicia para el compañero Aldo, que, a una década, sigue dando la batalla por sobrevivir”.
Enfatizaron que, a una década de aquella noche, el caso está lejos de resolverse, situación lamentable para los padres que han permanecido en pie de lucha desde el primer momento en que sus hijos desaparecieron.
“Hoy, a una década, queremos decir que estamos lejos de saber la verdad y también esta década que hoy se está cumpliendo, los padres y madres tuvieron que caminar cuesta arriba, tuvieron que luchar contra vientos y mareas, tuvieron que enfrentarse mentiras tras mentiras de las autoridades”.
Los padres y madres de familia exigen a las autoridades mexicanas la presentación con vida de los estudiantes, la presentación ante la justicia de los responsables, la extradición de Tomás Zerón, quien se encuentra refugiado en Israel, el regreso del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y la entrega de los más de 800 folios faltantes por parte de las Fuerzas Armadas.
La conferencia se llevó a cabo en el aula magna de la Facultad de Filosofía y Letras, donde los asistentes recibieron a los familiares con el conteo del uno al 43 y la consigna “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
El representante legal de los familiares informó que tienen poca información sobre una línea de investigación que plantea que al menos un grupo de 17 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos fue trasladado a las celdas municipales de Iguala y más tarde fue transportado fuera del municipio guerrerense, por lo que pidió a las autoridades que profundicen en esta línea de investigación, además de no abandonar las líneas que plantean la participación del Ejército mexicano en los hechos.
Por su parte, las madres de los jóvenes normalistas recriminaron al presidente Andrés Manuel López Obrador, haber incumplido el compromiso de dar con el paradero de los jóvenes y con los responsables de su desaparición.
“Cuando el presidente anduvo en su campaña nos prometió que iba a dar con nuestros hijos, nos dio muchas esperanzas, sentimos que era verdad lo que nos estaba prometiendo, él firmó un decreto para dar con la verdad, pero tal parece que protege mucho a sus militares”.
Lo que más destacaron las madres de familia fue la insistencia del mandatario en deslindar al Ejército de los hechos aun cuando en un principio él se había comprometido a dar con los culpables sin importar la institución a la que pertenecieran.
“Era la esperanza para cuando él inicio su sexenio, él dijo que iba a perseguir a los culpables, a los responsables, así fuera el Ejército y ahora resulta que no”.
Una de las oradoras de la comisión de padres resaltó la importancia de desmilitarizar al país, pues considera que esto pondría un alto a la impunidad y el empoderamiento dentro del Ejército mexicano.
“Exigimos la desmilitarización inmediata del país, poner un alto a los privilegios de la impunidad y al empoderamiento del Ejército”.
También, exigió que se detenga la persecución y las descalificaciones a los padres, a los normalistas y a las personas y organizaciones que han acompañado a los familiares en esta lucha que hoy cumple diez años.
“Exigimos que cese la persecución, las agresiones y las campañas de difamación contra las madres y padres de Ayotzinapa, contra los camaradas normalistas, contra los defensores que participan en su causa, esta lucha es una causa legítima, esta lucha va más allá de proyectos políticos y agendas partidistas”.
Calificaron el caso Ayotzinapa como un recordatorio de la deuda de justicia del Estado con el pueblo, por lo que su esclarecimiento es necesario para todas y todos.
“Ayotzinapa es un innegable recordatorio de la histórica deuda de la justicia con nuestro pueblo y su esclarecimiento es imperioso para todas y todos”.
Con información: Proceso.com