¿Qué es una mujer?

La respuesta podría parecer tan obvia, pero estamos en una época en la cual el objetivo es generar confusión sobre las cosas obvias, ya que al parecer la falta de capacidad mental se ha vuelto una condición para generar derechos inexistentes y reconocimiento de figuras contra todo sentido común atacando la naturaleza humana.  

Así que ahora tenemos que tener bien claro el concepto de mujer o si no cualquiera con la boca pintada y tacones nos va a desplazar e incluso abusará de nuestros derechos como verdaderas mujeres, ¡bueno! Qué digo con la boca pintada y tacones, simplemente con el hecho de que se cambie el sexo en el acta  de nacimiento puede decir que es mujer y convertirse en “beneficiaria” de los reconocimientos a las mujeres, total, por años las feministas, si, esas de pañuelitos verdes y morados, se han encargado de “luchar” porque la sociedad aprenda que una mujer “se hace”, cuando en realidad desde que se nos engendra se define nuestro sexo y durante toda nuestra vida nuestras células gritarán “cromosomas XX” que nos darán características propias de nuestro sexo que van desde lo físico  hasta lo mental.

Los diccionarios dan el significado de mujer como “persona de sexo femenino”; la Real Academia Española dice que sexo es la “condición orgánica masculino o femenina de los animales y las plantas”; para la distinguida academia que sigue firme en no reconocer las simpladas del pésimo lenguaje que pretende imponer la ideología de género, define “femenino” con varios conceptos como: femenino, na, del latín “femin?nus”;1. Propio de mujeres.2. Perteneciente o relativo a ellas.3. Que posee los rasgos propios de la feminidad. Y podríamos seguirle.

Femenino y mujer van en el mismo concepto, y es maravilloso. Para ser mujer se requiere que al momento de la concepción el óvulo sea  fecundado por un espermatozoide con un cromosoma X, entonces al unirse el cromosoma X del óvulo con el cromosoma X del espermatozoide tenemos que el producto de esa concepción es una mujer porque resulta que esa unión de dichos cromosomas va a conceder al nuevo individuo características especiales que no podría obtener si se hubieran unido un cromosoma X con un cromosoma Y. Por ejemplo: las mujeres tienen ovarios, Trompas de Falopio, útero, cuello uterino, vagina, monte de venus, labios mayores y menores, clítoris y glándulas vestibulares; mientras que los hombres tienen pene, escroto, uretra, testículos, epidídimo, conducto deferente, vesículas seminales, conductos eyaculadores, próstata y glándulas bulbouretrales. ¡son muuuchas diferencias en los aparatos reproductores como para decir que un vestido y tacones hacen una mujer!

Por otro lado tenemos que la unión de cromosomas al momento de la concepción genera diferencias en el esqueleto de quienes portamos en  nuestro ADN cromosomas XX y quienes portan cromosomas XY; por ejemplo hay diferencias en los huesos como la escotadura ciática mayor, el hueso sacro, la curva sacra y la cintura pélvica, además de la mandíbula, la glabela, mastoides y las órbitas oculares. Y ni toquemos el tema de las zonas donde se acumula la grasa en unos y en otras porque por más que se pinten la boca las caderas no se les van a rellenar igual a los hombres que a nosotras. ¡Entre más profundizamos en el tema es más complicado decir que la mujer se hace!

Por otra parte el peso del cerebro de la mujer es aproximadamente de 1130ml y el del hombre de 1260ml, sin mencionar las maneras tan diferentes de  procesar la información que recibe el cerebro de una mujer al de un hombre y la forma resolver, en general la forma de pensar es día y noche, y eso no se puede modificar con cirugías o tratamientos hormonales. 

Las mujeres, en cada célula de nuestro cuerpo vamos a encontrar que dicen “cromosoma XX”, no necesitamos decir que somos o que nos sentimos mujeres para serlo porque absolutamente todo en nuestro cuerpo, hasta la pestaña más pequeña nos grita “soy mujer”, y no hay forma de sentirse otra cosa aunque nos queramos engañar  porque no hay poder humano que le gane a la naturaleza, podrán engañarse o tratarse de engañar, pero la verdad biológica terminará recordándonos bien quienes somos tarde o temprano.

Los cromosomas XX que nos dan tantas diferencias entre sexo femenino y masculino, no se modifican con absolutamente nada, por eso es que la mujer nace y muere mujer pase lo que pase, y el hombre nace y muere hombre pase lo que pase. Y su ADN le indicará durante toda su vida qué sexo es, quiera o no.

La verdad es verdad aunque quieran repetir 1000 veces la misma mentira.

Así que en una época en la que lo lógico se tiene que explicar y el sentido común es el menos común de los sentidos, debemos entender que ser mujer es una persona cuyo ADN tiene cromosomas XX, los cuales nos dan un cúmulo de características físicas y mentales que nos permiten desarrollar el lado femenino de la sociedad para fortalecerla en su desarrollo integral.

Posdata: y la que soporte jajajajaja

Vamos México, eres el águila que devora serpientes.

Lic. Ruth Sánchez Hernández