El portal WikiLeaks informó este lunes que su fundador, Julian Assange, quedó en libertad luego de que el Tribunal Superior de Londres le concediera salir bajo fianza tras estar cinco años en prisión, pese a que Estados Unidos pidió su extradición por cargos de espionaje.
A través de redes sociales, WikiLeaks informó que tras su liberación, el fundador abordó un avión y partió de Reino Unido, para que pronto se reúna con su esposa, Stella Assange y sus hijos, en Australia.
“Este es el resultado de una campaña global que abarcó a organizadores de base, defensores de la libertad de prensa, legisladores y líderes de todo el espectro político, hasta llegar a las Naciones Unidas”, escribió en su cuenta de X.
“WikiLeaks publicó historias innovadoras sobre corrupción gubernamental y abusos contra los derechos humanos, responsabilizando a los poderosos por sus acciones. Como editor en jefe, Julian pagó severamente por estos principios y por el derecho del pueblo a saber”, agregó el portal en su publicación.
En 2010, WikiLeaks hizo públicos cientos de miles de documentos militares estadounidenses clasificados sobre las guerras de Washington en Afganistán e Irak, las mayores violaciones de la seguridad de este tipo en la historia militar de Estados Unidos.
Assange fue acusado durante la administración del expresidente Donald Trump por la publicación masiva de documentos secretos estadounidenses por parte de WikiLeaks, que fueron filtrados por Chelsea Manning, una exanalista de inteligencia militar estadounidense que también fue procesada en virtud de la Ley de Espionaje.
Los más de 700 mil documentos incluían cables diplomáticos y relatos del campo de batalla, como un video de 2007 de un helicóptero Apache estadounidense disparando contra presuntos insurgentes en Irak, matando a una docena de personas, entre ellas dos miembros del personal de noticias de Reuters. Ese video se hizo público en 2010.
Los cargos contra Assange provocaron la indignación de sus numerosos partidarios en todo el mundo, que desde hace tiempo sostienen que Assange, como editor de Wikileaks, no debería enfrentarse a los cargos que se suelen utilizar contra los empleados del gobierno federal que roban o filtran información.
Muchos defensores de la libertad de prensa han argumentado que acusar penalmente a Assange representa una amenaza para la libertad de expresión.
Assange fue detenido por primera vez en Reino Unido en 2010 en virtud de una orden de detención europea, después de que las autoridades suecas dijeran que querían interrogarlo por acusaciones de delitos sexuales que posteriormente fueron retiradas. Huyó a la embajada de Ecuador, donde permaneció siete años, para evitar su extradición a Suecia.
Fue sacado de la embajada en 2019 y encarcelado por saltarse la fianza. Desde entonces está en la cárcel de máxima seguridad londinense de Belmarsh, desde donde lleva casi cinco años luchando contra la extradición a Estados Unidos.
Con información de
Latinus.us