En las últimas semanas, la ciudad de Chihuahua ha sido testigo de una creciente polémica social derivada del desmonte del Cerro del Caballo, el reciente incendio ocurrido hace dos semanas, y la manifestación pacífica de cientos de personas, miembros de Salvemos los Cerros y diversos clubes de senderismo. En este contexto, es fundamental aportar elementos informativos al análisis de la situación:
Servicios Ambientales Irreemplazables: Los cerros brindan servicios ambientales que no pueden ser sustituidos con simples medidas de mitigación. Por ejemplo, una área natural puede filtrar agua, y al desmontarla o modificarla, esta capacidad se pierde o disminuye considerablemente. Aunque se obligue a las desarrolladoras a plantar árboles como medida compensatoria, esta acción solo pretende mitigar el daño, pero no lo revierte, y en muchos casos, el daño es irreversible.
Hogar de Especies y Espacio para el Esparcimiento: Los cerros son el hogar de diversas especies de flora y fauna, algunas de ellas protegidas. Además, son espacios ideales para el esparcimiento, el deporte, las artes y las ciencias. Calificar estos espacios como desprovistos de interés turístico o paisajístico es un error. Cualquier manifestación de impacto ambiental que omita estos puntos cruciales no debería ser aprobada.
Propiedad Privada y Regulación: La propiedad privada no otorga un derecho absoluto para hacer lo que sea. Las leyes regulan el comportamiento humano incluso dentro de las paredes de una casa. Si tienes un terreno forestal, necesitas permiso para instalar una fábrica; lo mismo aplica para terrenos habitacionales. En el caso del Cerro del Caballo, existe una discrepancia en su zonificación: el municipio lo considera urbanizable, mientras que la federación lo clasifica como suelo forestal. ¿Cuál tiene la razón? La respuesta es clara: la federación, pues las leyes generales así lo dictan.
Posibilidad de Declaración como Área Natural Protegida: Es falso que el Cerro del Caballo no pueda ser declarado como área natural protegida. Las leyes del Estado de Chihuahua permiten que cualquier sitio de importancia ambiental sea protegido, independientemente de si es propiedad privada, ejidal o de otro tipo. Lo que se necesita es voluntad política. Cabe destacar que en Chihuahua no existe ninguna área natural protegida de carácter estatal o municipal; todas son federales. Esta es una asignatura pendiente que debemos abordar.
El tema del Cerro del Caballo es amplio y merece un diálogo profundo. ¿Qué opinas sobre el daño que se causa a las áreas naturales? ¿Consideras que es justificable sacrificar la salud del medio ambiente a cambio de ganancias económicas? ¿Crees que existen mejores lugares para construir casas que el Cerro del Caballo? Me encantaría conocer tus opiniones y comentarios. Chihuahua necesita la participación de todos los sectores de la sociedad para mejorar. Te invito a unirte a este diálogo social por el Cerro del Caballo.