CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El debate sobre la sobrerrepresentación de Morena y sus aliados en las cámaras legislativas, tras el reparto de las diputaciones y senadurías plurinominales, se invitó con fuerza en el Instituto Nacional Electoral, donde representantes del oficialismo defendieron el control de las dos terceras partes de la Cámara de Diputados gracias a la representación proporcional, y los de la oposición sostuvieron que el límite a la sobrerrepresentación buscaba evitar que las minorías se quedaran sin derechos.
“El venir a pretender replantear una claridad constitucional reiterada, la verdad es que más bien parece un discurso de: ‘ustedes tienen mucho, dennos algo’. No, no es así, no funciona la democracia así”, retó el diputado Sergio Gutiérrez Luna, representante de Morena ante el INE, a la oposición.
“Aquí hay gente que sostiene que se puede tener el 54% de los votos y es legal y legítimo pasar al 75% del Congreso, y que el otro 42% de los votos pase a ser el 25% del Congreso”, sostuvo Guadalupe Acosta Naranjo, representante del PRD, según quien el espíritu de la ley sobre representación proporcional consistía en “garantizar el equilibrio de los ciudadanos, era que no quedaran las minorías sin derechos”.
El pasado lunes 3, la Secretaría de Gobernación (Segob) dio a conocer un cálculo de los legisladores que obtendrán los partidos en la próxima legislatura, con todo y plurinominales: según el exconsejero electoral Ciro Murayama, la asignación de plurinominales estimada por la Segob dará a Morena y sus aliados del PVEM y PT el 73% de los curules en la Cámara de Diputados –más que la mayoría calificada--, a pesar de que obtuvieron, en conjunto, el 54% del voto ciudadano.
Los datos de la Segob y la polémica levantada por Murayama revivieron una discusión añeja en torno a la legislación electoral: la Constitución prohíbe a un partido beneficiar de más del 8% de sobrerrepresentación, pero deja un hueco para que las coaliciones lo tengan, sumando las sobrerrepresentaciones de cada partido político que integra la alianza.
Gracias a este hueco, Morena y sus aliados del PVEM y el PT tienen ahora una sobrerrepresentación del 19% en la Cámara de Diputados, lo que causa indignación en la oposición. El PRI tuvo la misma ventaja en 2012 y en 2015, aunque en una escala menor, gracias a su alianza con el PVEM –una agrupación que siempre se acopla con el partido en el poder--, y a pesar de los reclamos de Morena.
Durante la sesión que el Consejo General del INE sostuvo hoy, el tema de la sobrerrepresentación ocupó las conversaciones, que en los últimos días estuvieron acaparadas por las denuncias de la oposición hacia la inequidad del proceso electoral. Este viernes, los representantes del PAN incluso reconocieron abiertamente el triunfo de Claudia Sheinbaum Pardo, una manera de deslindarse del intento del líder nacional del partido, Marko Cortés Mendoza, de lanzar una campaña en rechazo de un fraude electoral.
En su lugar, los representantes de la oposición denunciaron el reparto injusto de las curules plurinominales, y el anuncio de ese reparto por parte de la Segob, instancia que no está dotada de estas facultades.
“La prohibición de la sobrerrepresentación, esa prohibición es un mecanismo de compensación para las minorías, no es un mecanismo para favorecer a las mayorías. Ese mecanismo de compensación establece un límite máximo del ocho por ciento, no mandata un ocho por ciento adicional para los partidos que integren una coalición”, lamentó el priista Emilio Suárez Licona.
Gerardo Fernández Noroña, integrante de la campaña de Claudia Sheinbaum Pardo y representante del PT ante el INE, rechazó de tajo la interpretación de la oposición. “Nos quieren ahora regatear”, lanzó el diputado del PT, quien afirmó que “la ley le impide a una fuerza política tener dos tercios del congreso, pero no se los impide a una coalición”.
Aunque reconoció la necesidad de discutir una nueva reforma electoral, Fernández Noroña señaló un “pequeño detalle” que omite el PAN cuando se critica el sistema: el blanquiazul tendrá 38 diputados plurinominales, a pesar de que los votos obtenidos le dieron 34 de mayoría.
En la misma línea, el diputado Hamlet García Almaguer, de Morena, reviró que los partidos minoritarios están sobrerrepresentados en las prerrogativas que recibieron, como la asignación de recursos del Estado o de tiempos en radio y televisión, y aseveró: “¿Por qué la asignación de las prerrogativas no se haría por coalición? Ahí sí les gusta que sea por partido político”, dijo.
“Este principio de sobrerrepresentación se hizo por el PRI, pero ya luego no fue usado solo por el PRI”, observó por su parte el senador Emilio Álvarez Icaza, representante del PRD ante el INE, quien agregó que “no se puede pasar del 54% al 75%, esto no refleja la voluntad popular”.
“No se vale tratar de sacar las cuentas con la misma fórmula que se han hecho por lo menos en las últimas tres, cuatro elecciones”, comentó Carlos Alberto Puente Salas, representante del PVEM. “Creo que es momento de poner altura de miras, de aceptar la decisión de las mayorías, aceptar que vivimos en democracia”, añadió.
Con información de Proceso