El partido gobernante de Sudáfrica, el histórico Congreso Nacional Africano (CNA), prácticamente ha ganado las elecciones generales celebradas el miércoles con el 40,12% de los votos. Sin embargo, esta victoria llega con un revés significativo: por primera vez desde la llegada al poder de Nelson Mandela en 1994, el CNA ha perdido la mayoría absoluta.
Con el 97.73% del voto escrutado, los resultados provisionales de la Comisión Electoral Independiente (IEC) indican que el CNA obtiene su peor resultado en treinta años. Esto obligará al presidente Cyril Ramaphosa a formar alianzas con otras formaciones políticas para optar a un segundo mandato de cinco años.
Este resultado representa una caída significativa del 57,5% obtenido en 2019 y marca un cambio histórico en la política sudafricana desde las primeras elecciones multirraciales del país. La pérdida de la mayoría absoluta destaca la necesidad de renovación y alianzas estratégicas dentro del CNA para mantener su posición de poder.
En segundo lugar, se mantiene la Alianza Democrática (AD), un partido de centroderecha liberal liderado por John Steenhuisen, que ha conseguido el 21.72% de los sufragios. Este resultado es una leve mejora respecto al 20.77% obtenido en 2019, consolidando su posición como la principal oposición al CNA.
El tercer lugar ha sido ocupado por el uMkhonto weSizwe (Partido MK), el nuevo partido del expresidente Jacob Zuma, con el 14.80% de los votos. La aparición del Partido MK ha influido significativamente en la división del voto del CNA, evidenciando las fracturas internas y la fragmentación del electorado del partido gobernante.
Aunque el Tribunal Constitucional impidió a Zuma, condenado en 2021 a quince meses de cárcel por desacato, concurrir a estas elecciones, su partido ha logrado desbancar a los Luchadores por la Libertad Económica (EFF) de Julius Malema, que han caído al cuarto lugar con el 9.39%.
Cerca de 28 millones de sudafricanos fueron llamados a las urnas el pasado miércoles para elegir a los 400 miembros de la Asamblea Nacional, que a su vez escogerán al presidente, así como a las autoridades de las nueve provincias del país. La IEC ha informado que la tasa de participación provisional es del 58.59%, por debajo del 66% registrado en 2019, a pesar del entusiasmo palpable entre la población.
La comisión electoral dispone de siete días para anunciar los resultados oficiales, aunque se espera que los dé a conocer este fin de semana. La alta participación y el voto dividido reflejan un electorado sudafricano cada vez más crítico y exigente con sus representantes políticos.
Con información de Crónica.