NUEVA YORK (AP) — Es hora de la Gala del Met y el desfile de moda de las celebridades incluye un remolino de flora y fauna en una alfombra teñida de verde y rodeada de follaje. Jennifer Lopez optó por hojas plateadas con un vestido de diosa con muchas transparencias y ajustado como una segunda piel, Zendaya fue una fantasía oscura, en dos ocasiones.
Este año ambas son copresidentas del evento anual de recaudación de fondos del Museo Metropolitano de Arte. Y ambas recibieron vítores de la multitud de entusiastas de la moda que se agolpaban cerca de la entrada.
López (en Schiaparelli) se veía espectacular con un vestido con muchas transparencias que la abrazaba como una segunda piel. Es su Gala del Met número 14.
Zendaya, uno de los rostros de moda, iba en tonos azules y verdes, con un tocado a juego, con detalles de hojas y un dramático maquillaje con aire gótico. Más tarde, en un giro poco común, volvió a caminar para cerrar la alfombra en un vestido negro de Givenchy firmado por John Galliano con un tocado de flores de Alexander McQueen.
Habían pasado cinco años desde la última vez que Zendaya asistió a la Gala del Met. Su look en colores de pavo real, era de Maison Margiela. López se fue con diamantes de Tiffany & Co., incluido un impresionante collar con motivos de pájaros con un diamante de más de 20 quilates en su centro.
Había flores por todas partes, acorde para la temática de este año: "El Jardín del Tiempo". El tema está inspirado en el cuento homónimo de J.G. Ballard de 1962.
Mindy Kaling seguramente estará en las listas de las mejor vestidas con un modelo con remolinos de color arena que se elevaban sobre su cabeza en la parte posterior. La parte trasera era desmontable por lo que sí podría cenar. Su modelo era del modisto indio Gaurav Gupta.
Usher sostenía una sola rosa roja, con un traje negro misterioso, un sombrero de ala ancha y un broche negro en una solapa.
Gigi Hadid trajo el drama en un look de rey del drama, Thom Browne. Su estilo blanco estaba adornado con 2,8 millones de microcuentas con flores amarillas y tallos verdes. Iba muy glamurosa con el cabello con corte bob con ondas y labios carmesí.
Si hay una reina de la Gala del Met, además de Anna Wintour quien es la mente maestra de la noche, es Sarah Jessica Parker. La actriz es asidua a la gala y se toma en serio el tema de cada año, investigando cada detalle. En esta ocasión llevaba un vestido con polizón que le daba un aire de Alicia en el País de las Maravillas con un sombrero de Philip Treacy. El vestido era de Richard Quinn. Su largo cabello caía detrás de su espalda en ondas, un estilo que se convirtió en una tendencia de belleza de la noche.
Serena Williams llevó el dorado a otro nivel con un vestido brillante de un solo hombro. Ariana Grande iba de Glinda la Bruja Buena, aprovechando al máximo su look strapless de color pálido con unos adornos en 3D a la altura de los pómulos. Llegó con su coprotagonista de "Wicked", Cynthia Erivo, quien iba vestida de negro con pétalos rosados en un look más atrevido.
Cardi B, quien suele divertirse en la Gala del Met, hizo una o tres poses con su enorme vestido negro de tul. Llevaba esmeraldas y un turbante negro alto. Necesitó varios ayudantes para subir su vestido por las escaleras.
Penélope Cruz, por su parte, se vistió de negro gótico de la mano de Chanel. Tenía un corpiño y una silueta de hombros descubiertos similar a la de la Bella Durmiente. Hubo otra invitada al estilo de La Bella Durmiente: Kendall Jenner con un modelo de Givenchy realizado por Alexander McQueen en 1999.
La hermana de Kendall, Kylie Jenner, iba al estilo del viejo Hollywood con un elegante vestido strapless escotado, una flor blanca en su cabello recogido y una gran cauda en la falda. Curiosamente, su hermana mayor, Kim Kardashian, cubrió su hermoso corsé plateado con un motivo de hojas de Maison Margiela con un suéter gris abultado.
Dua Lipa era un tipo de princesa completamente diferente. Se puso a bailar de negro de la mano de Marc Jacobs, que la acompañaba.
Los vestidos con aire de princesas de entre los 400 invitados de la noche eran una aparente referencia a la exhibición de primavera del Met que da inicio a la gala. Se titula "Sleeping Beauties: Reawakening Fashion" (Bellezas Durmientes: El despertar de la moda) pero en realidad no tiene que ver con Disney, ni siquiera con las princesas.
Entre las princesas estaba el Sombrerero Loco, Barry Keoghan, con un estilo victoriano de terciopelo con una camisa de lazo de cuello alto debajo. Él, por supuesto, llevaba un sombrero de copa.
Demi Moore se apegó a la temática del jardín con un look de Harris Reed con enormes volantes rodeados de flechas con flores rosas y blancas pintadas a mano.
Diesel se abrió paso en la alfombra roja de gala con Dove Cameron. Era lo más diferente a Diesel que se puede hacer, también remitía al jardín. El look tenía mangas atadas a su cola.
Lily Gladstone optó por un modelo negro de Gabriela Hearst.
"Queríamos que me sintiera envuelta en el poder de mis antepasados", dijo. "Para los kiowa y los Blackfeet, nuestros antepasados son las estrellas, de ahí venimos. ... Siento que hace mucho tiempo que debíamos tener mucha más representación indígena y esta especie de mundo de alto nivel de la moda de alto lujo, porque esa es nuestra estética, ya sabes, a los nativos siempre les ha gustado el lujo".
Colman Domingo se puso una chaqueta blanca con capa y pantalones extra anchos, sosteniendo un ramo de alcatraces blancos, mientras que Tyla eligió un vestido hecho para que pareciera arena usando arena real en la tela. Necesitó ayuda con un reloj de arena que sostenía mientras subía las escaleras del museo. El diseñador de Domingo fue Willy Chavarría.
Sam Smith llevaba rosas metálicas plateadas y doradas metidas en la cintura de una chaqueta, y Jack Harlow también llevó flores, pero sutilmente con un boutonniere floral plateado y perlado.
Wintour lució un abrigo negro adornado con flores multicolores del Loewe. El copresidente de la gala Bad Bunny, iba completamente de negro. Una embarazada Lea Michele lució un vestido de Rodarte, inspirado en la colección primavera/verano 2012 de la marca.
"Me siento honrada de estar aquí y traer a mi bebé conmigo", dijo Michele. "No creo que me permitieran traer un acompañante, pero lo traigo", dijo entre risas. Estoy muy agradecida. Me siento muy hermosa, ya sabes, en este embarazo".
Entre los que se divirtieron mucho con el tema de la naturaleza y el jardín estaba Lana Del Rey. Subió los escalones del museo como un árbol real, con la cara cubierta por una tela sostenida por sus ramas y una sola rosa roja en la mano.
Nicki Minaj también salió de la caja con un vestido amarillo metálico brillante con grandes flores colgando y balanceándose mientras se movía.
Jerry Seinfeld y Jimmy Fallon hicieron que la multitud aplaudiera con esmoquin tradicional.
Es una fiesta, sin duda, con cócteles y cena, pero también es una gran recaudación de fondos para el Instituto del Vestido del Met, el único departamento del museo que debe pagarse a sí mismo. El año pasado, la gala recaudó unos 22 millones de dólares. Wintour, una fideicomisaria del Met por quien se ha cambiado el nombre de parte del instituto, organiza la gran noche. No se permiten celulares, lo que aumenta el atractivo.
También promueve la exposición "Sleeping Beauties: Reawakening Fashion". La muestra incluye 250 artículos de la colección permanente del Instituto del Vestido, incluidas algunas prendas que rara vez se ven en público y que son tan frágiles que necesitan estar en vitrinas. Los curadores querían involucrar todos los sentidos, incluido el olfato, en la exposición.
La muestra se abre al público el viernes y concluye el 2 de septiembre.
Con información de Proceso.