Este martes comenzó la primera de las dos jornadas de juicio oral al que se enfrenta el comunicador argentino Felipe Pettinato, acusado de abuso sexual simple a una menor de 15 años, familiar de su expareja Sofía Colosante.
El juicio se celebra en la localidad de San Isidro, en la zona norte del Gran Buenos Aires, a puerta cerrada y con la prohibición del ingreso de la prensa, para mantener la intimidad de la víctima.
Los hechos encausados habrían tenido lugar la madrugada del 8 de marzo de 2018 en el domicilio de la entonces adolescente, donde Pettinato se encontraba pasando unos días junto a otros miembros de la familia.
Abusos en el domicilio familiar
El abogado de la víctima, Andrés Bonicalzi, explicó que los abusos ocurrieron en la casa donde vivía la menor con su madre, que en ese momento era pareja del padre de Sofía Colosante.
"Sofía Colasante no vivía en esa casa, pero durante una semana de marzo de 2018, la familia llevó a Felipe [Pettinato] a vivir con ellos", explicó Bonicalzi, en declaraciones recogidas por el portal TN.
Según el letrado, esa estancia de una semana ocurrió porque Pettinato estaba "como en una especie de internación domiciliaria" en casa de su amigo Melchor Rodrigo, pero la convivencia se hizo insostenible y el padre de Colosante se ofreció a alojar al comunicador por unos días.
Sin embargo, la estadía duró poco "porque la mamá de la denunciante finalmente quiso que se fuera".
La víctima no contó inmediatamente lo sucedido, sino que lo hizo meses después, cuando su madre la llevó a un profesional después de notar conductas extrañas en la adolescente. De acuerdo al abogado, el temor de la adolescencia era que ocurriera una ruptura familiar que, finalmente, se produjo.
"Sofía tomó posición a favor de Felipe y no volvió a hablarle, los padres se terminaron separando en 2019 después de muchos años de relación y eso quebró a la familia (...) la víctima la consideraba a Sofía como una hermana", comentó Bonicalzi.
Este martes, en el tribunal testificarán la madre de la denunciante, su expareja y Sofía Colasante, así como los peritos psicológicos y psiquiátricos que evaluaron a la víctima y a Pettinato.
Aparentemente, los profesionales avalan la existencia de indicios traumáticos compatibles con los hechos denunciados, según indicó Bonicalzi.
Una sospecha y un polémico prontuario
Este es el segundo juicio que enfrenta Pettinato, puesto que también está procesado por la muerte de Melchor Rodrigo, quien falleció en un incendio en la casa del comunicador. Al comunicador se le acusa de haber provocado el fuego intencionadamente, toda vez que las investigaciones apuntan a que se utilizó un producto que aceleró la combustión.
Pettinato se hizo conocido en Argentina de la mano de su padre, Roberto, que ya poseía espacios en la radio y la televisión en su país. Uno de los aspectos particulares del hoy acusado es su parecido físico con Michael Jackson, que fue cada vez más logrado por las cirugías plásticas a las que se sometió desde que era adolescente.
De hecho, el comunicador ha ofrecido varios shows imitando al artista y bautizó a su hija como Juana Michela, en aparente homenaje al rey del pop.
Sin embargo, en paralelo a esa particularidad, los escándalos por adicciones a las drogas, su internación en clínicas de rehabilitación, sus brotes psicóticos y las polémicas amorosas lo mantuvieron en el ojo de los medios, hasta que su presencia empezó a menguar tras la denuncia de abuso sexual simple y la posterior vinculación con la muerte de Melchor, su amigo y terapeuta.
Con información de actualidad.rt.com