La fertilidad es insuficiente para mantener la población en la mayoría de los países, según un vasto estudio publicado el jueves 21 de marzo, que advierte de desequilibrios que probablemente serán cada vez más acentuados de una región a otra en el mundo.
"La fecundidad está disminuyendo en todo el mundo", resume el estudio, publicado en la revista científica 'The Lancet', señalando que más de la mitad de los países tienen ya tasas de fertilidad demasiado bajas para mantener sus niveles de población.
Y añade que "en el futuro, las tasas de fecundidad seguirán disminuyendo en todo el mundo".
El estudio se basa en cifras del Global Burden of Disease, un vasto programa financiado por la fundación estadounidense Bill y Melinda Gates y diseñado para recopilar datos sanitarios de la mayoría de los países.
Los investigadores no solo evaluaron las tasas de fecundidad actuales de estos países, sino que también trataron de calcular las tendencias futuras en función de una serie de variables predictivas, como los niveles de educación y la mortalidad infantil.
Y llegaron a la conclusión de que, en 2050, tres cuartas partes de los países tendrán tasas de fertilidad insuficientes para mantener su población. Para 2100, la mayoría de los países se verán afectados.
Desequilibrio
Los investigadores también predicen que la población de los países pobres seguirá creciendo durante mucho tiempo, sobre todo en África subsahariana, mientras que disminuirá en los países desarrollados.
En su opinión, es probable que este desequilibrio tenga "considerables consecuencias económicas y sociales".
Este trabajo llega en un momento en que muchos países están preocupados por su evolución demográfica, entre ellos Francia, donde el presidente Emmanuel Macron ha pedido un "rearme demográfico".
Sin embargo, las previsiones del estudio de 'The Lancet' deben tomarse con cautela, señalan en el mismo número investigadores de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Critican una serie de opciones metodológicas, destacando en particular la debilidad de los datos actualmente disponibles en muchos países pobres. En cuanto al fondo del informe, sostienen que "hay que centrarse en los matices, no en el sensacionalismo, cuando se habla de descenso de las tasas de fecundidad".
También señalan que este fenómeno puede tener ventajas (medio ambiente, alimentación, etc.) e inconvenientes (sistemas de pensiones, empleo, etc.). Sobre todo, señalan que no hay "ninguna manera evidente" de hacer algo al respecto.
Con información de proceso.com.mx