Para Carolina Gómez, experta de la Sociedad Mexicana de Salud Pública, la promesa de salud universal y un sistema de atención de calidad, parecido a los países nórdicos, particularmente al de Dinamarca, seguirá sin cumplirse en 2023, debido al bajo presupuesto que se tiene para ese sector.
Otros factores que impedirán a México alcanzar los niveles de Europa del norte son el desabastecimiento de medicamentos y a la baja vacunación, que puede incidir en el resurgimiento de enfermedades consideradas erradicadas, lo cual podría elevar los costos de la atención.
“Creo, sinceramente que no, el 2023 no pinta nada bien en cuanto se refiere a los servicios y sobre todo al acceso a la salud que cada vez confunde más a los usuarios, especialmente a aquellos que no tienen seguridad social”, señaló a la agencia EFE.
El pasado 22 de diciembre, desde Quintana Roo, el presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que el año entrante México contará con unos de los mejores sistemas de salud a nivel mundial.
“Tengo el compromiso de que para el año próximo (2023), desde mediados del año próximo, vamos a tener uno de los mejores sistemas de salud pública del mundo”, se comprometió el presidente de la República. Para ello su gobierno trabaja en arreglar los centros de salud, las unidades médicas, los hospitales, y que en ellos que no falten médicos.
Para la experta, el año 2022 estuvo marcado por decisiones “frívolas” de las autoridades de salud, en primer lugar al desplazar “tácitamente” el programa federal IMSS Bienestar que servía a las familias más desprotegidas de zonas rurales y que ahora se pretende controle todos los servicios de salud.
“Ahora quieren convertirlo en el organismo que controle todos los servicios de salud, los administre y también se convierta en una parte financiadora y eso es una decisión apresurada, sin sustento”, consideró la experta de la Sociedad Mexicana de Salud Pública.
Lo difícil que es alcanzar a Dinamarca
A dos años de que concluya el mandato de López Obrador, Gómez consideró prácticamente imposible que en ese tiempo se alcance un sistema de salud parecido al de Dinamarca.
“Está equivocado el presidente alardeando de que tendremos un sistema de ese nivel europeo, con un servicio impecable como es en ese país nórdico. Nosotros acá no podemos ni siquiera contar con las vacunas básicas”, lamentó Carolina Gómez.
Además, recordó que lejos de aumentar el presupuesto en el tema de salud, el Gobierno mexicano ha ido disminuyendo el dinero destinado en este rubro, e incluso desaparecerá el fondo de enfermedades catastróficas que servía para atender a pacientes con enfermedades como cáncer.
“Ahí es donde se pagaban todos los insumos y tratamientos, eso es una tragedia para los niños con cáncer, especialmente”, dijo.
Aunado a ello, la experta dijo que en el tema de la pandemia, si bien la intensidad de la misma no es como en un principio, ya se convirtió en una enfermedad recurrente “lo cual es de preocuparnos porque no se ha terminado de vacunar con el esquema completo. Necesitamos tener refuerzo de la vacuna”.
El panorama en 2023 será sombrío
“No va a haber ningún cambio, terminaremos el sexenio con muchos pendientes, con indicadores de salud muy preocupantes, que parecieran números nada más pero detrás de cada número hay una familia que invirtió de su bolsillo o perdió un familiar porque no fue atendido de manera eficiente”, afirmó.
Destacó que lo que realmente hace falta para que el sistema de salud empiece a caminar es, entre otras cosas, “recursos financieros, planeación, una buena gestión en salud y experiencia, cosa que ninguno de los funcionarios que está trabajando con el presidente tiene”, enfatizó.
Con información de Infobae