Pico de lluvia de meteoritos de las Perseidas este mes

La lluvia de meteoritos de las Perseidas alcanzará su punto máximo en la noche del 12 de agosto, solo cuatro días después de la luna nueva del 8 de agosto, por lo que los cielos oscuros deberían ser bastante favorables para la exhibición anual, que es una de las exhibiciones más confiables de "estrellas fugaces". . " Eso está en marcado contraste con el próximo agosto, cuando los meteoros coincidirán con la luna llena .

Aunque las tasas de perseidas serán más altas desde las primeras horas de la mañana del 12 de agosto hasta el 14 de agosto, en total, la lluvia de meteoritos durará aproximadamente dos semanas, del 25 de julio al 18 de agosto.

En la noche del 12 de agosto, la luna se pondrá alrededor de las 10:30 pm hora del día local. La pantalla debería alcanzar su punto máximo más tarde esa noche para los observadores de todo el hemisferio norte, especialmente cuando comienza el crepúsculo matutino. Según el Calendario de Meteoritos 2021 de la Organización Internacional de Meteoritos (OMI) , las Perseidas deberían alcanzar su punto máximo durante aproximadamente 12 horas, centradas en el momento en que la longitud de la eclíptica del sol es de 140,0 ° a 140,1 ° (equinoccio de 2000,0), o el 12 de agosto desde 3 a 6 pm EDT (1900-2200 GMT).

Los observadores de Europa del Este están en una posición óptima para el pico de las Perseidas, pero los norteamericanos no se quedan atrás. Un solo observador bajo cielos oscuros y despejados nominalmente puede ver 60 miembros de la ducha cada hora, sin embargo, los observadores con cielos excepcionalmente oscuros a menudo registran números aún mayores.

Las Perseidas son particularmente atractivas para introducir al público a la astronomía porque es un punto culminante celestial que se puede disfrutar sin telescopios u otro equipo. Al planificar un evento de divulgación pública, recuerde que la cantidad de meteoros visibles se puede mejorar sustancialmente seleccionando un sitio muy oscuro que esté libre de luces brillantes, neblina y humo.

En el máximo de las Perseidas, estos meteoros parecen divergir de un punto llamado "radiante" ubicado cerca del famoso Cúmulo de Estrellas Doble en la sección norte de la constelación de Perseo . A medida que avanza la noche, el radiante se eleva progresivamente hacia el cielo en el noreste hasta que el amanecer termina observando.

En los Estados Unidos, el radiante está tan al norte que está por encima del horizonte en la mayor parte del país cuando cae la noche. Por lo tanto, algunas Perseidas pueden ser visibles tan pronto como comienza la observación, aunque aparecen muchos menos meteoros antes de la medianoche, incluso en la noche de la lluvia máxima.

Mientras tanto, el radiante siempre está bajo o por debajo del horizonte para lugares al sur del ecuador como Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica, donde se pueden ver pocas o ninguna Perseida.

Los meteoritos que aparecen cerca del radiante, en Perseo y las constelaciones cercanas de Casiopea , Andrómeda y Auriga, tienen trayectorias en escorzo, mientras que los que están lejos tienden a ser más largos y rápidos.

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Las perseidas aparecen blancas o amarillentas y son bien conocidas por presentar muchos meteoritos brillantes y fragmentados con trenes finos y duraderos. La lluvia proviene de la escoria del cometa Swift-Tuttle , que orbita alrededor del sol, en promedio, cada 130 años.

Cada vez que el cometa pasa cerca del sol, como lo hizo en 1992, libera un rastro de partículas diminutas a lo largo de su órbita. La Tierra pasa cerca de la órbita del cometa a mediados de agosto e interactúa con estos pequeños trozos de material del cometa, que chocan contra nuestra atmósfera a unas 37 millas (60 kilómetros) por segundo.

A pesar de que la mayoría de estos escombros no son más grandes que granos de arena, la fricción libera la energía cinética de las partículas en destellos de luz de corta duración. La energía liberada por gramo del peso del meteoroide supera con creces la eficiencia energética de los explosivos más poderosos hechos por humanos.

Una partícula algo más grande, digamos del tamaño de un guisante o un guijarro, puede crear el efecto de una "estrella fugaz" tan brillante como Júpiter o incluso Venus, mientras que un meteoroide del tamaño de la canica de un niño puede evolucionar hasta convertirse en una bola de fuego deslumbrante y resplandecer. los cielos con un brillo que se aproxima al de una luna llena. Si explota silenciosamente en vuelo, como sucede a veces con objetos extremadamente fríos que se calientan repentinamente a más de 1,000 grados Fahrenheit (540 grados Celsius) en el lapso de un latido del corazón, se llama bólido.

Es cierto que estos objetos extraordinariamente brillantes son pocos y distantes entre sí, pero solo necesita ver uno para que valga la pena toda una noche de observación del cielo.

Consejos de visualización

Para apreciar plenamente las Perseidas, asegúrese de estar cómodo. En lugar de quedarse de pie y mirar boquiabierto al cielo (y arriesgarse a sufrir rigidez en el cuello), estírese en un saco de dormir aislado o, mejor aún, en una silla de jardín reclinable y larga cubierta por una manta pesada.

Espere que la temperatura efectiva esté muy por debajo de lo que predice su meteorólogo local: cuando se sienta cerca del suelo que se enfría rápidamente, incluso si el aire está un poco húmedo, puede enfriarse bastante. Además de las capas, tenga algo de comida para picar, así como una bebida (pero no licor, porque eso afectará su estado de alerta).

Cuando salga al aire libre por primera vez, dé tiempo a sus ojos para que se adapten a la oscuridad; después de unos 20 minutos en la oscuridad, las pupilas de los ojos se abren como pozos, recogiendo cuatro o cinco veces la luz que normalmente reciben. Cuanto más tiempo estés en la oscuridad, más estrellas y meteoros verás. Si usa una linterna, cubra la lente con celofán rojo, ya que la luz roja tenue afecta sus ojos mucho menos que la luz blanca.

También considere recopilar observaciones que pueda contribuir a los científicos. Los observadores aficionados pueden realizar observaciones útiles contando meteoros durante varios intervalos consecutivos de una hora en tantas noches como sea posible durante la duración de la lluvia. Todo lo que necesita es un lápiz, un portapapeles y una silla de jardín o una manta. Para ser verdaderamente significativo, su recuento debe hacerse desde un área abierta donde nada se inmiscuya en su campo visual.

Observa el cielo con atención y, sin mirar hacia abajo, anota cada vez que veas un meteoro. Los recuentos cuidadosos de una hora son valiosos para determinar cuándo la ducha alcanza su fuerza máxima y la velocidad a la que la actividad aumenta o disminuye. Registre las horas de inicio y finalización de la sesión de observación y las horas de los interludios cuando no esté mirando el cielo.

Si dos o más personas observan, ¡no se debe registrar un meteoro solo porque alguien suelta un grito! Cuando los grupos observan, los recuentos de cada individuo deben informarse por separado, no combinarse con los de otros miembros del grupo; Los resultados agrupados de este tipo no tienen sentido, ya que no se pueden convertir en una tarifa horaria estándar de un solo observador.

También es importante contar por separado los meteoros esporádicos, aquellos que no emanan del radiante Perseidas y, como tales, no son Perseidas. En promedio, espere alrededor de 5 a 10 meteoros esporádicos por hora. Las perseidas, por otro lado, pueden identificarse por el hecho de que sus huellas, si se extienden hacia atrás en el cielo, conducen al punto radiante de Perseo. Si se sostiene un lápiz o un palo recto en línea con la trayectoria del meteorito, interceptará el radiante. Si el meteoro no cumple con esta prueba, no es una Perseida y puede clasificarse como esporádico.

Para obtener más detalles sobre el conteo de meteoros, la Organización Internacional de Meteoros ofrece algunas sugerencias.

Hay algunas otras lluvias de meteoritos confiables que ocurren en otras épocas del año, pero las Perseidas son probablemente las más fáciles de observar. Las Gemínidas son aún más prolíficas, pero ocurren a mediados de diciembre, a menudo en noches muy frías. Las perseidas llegan cuando los principales peligros del observador de estrellas son los mosquitos.

Pero tenga en cuenta que el término "lluvia de meteoritos" es inapropiado. Si es una ducha, está muy dispersa; es más como esperar el goteo ocasional de un grifo. Pero si tienes la suerte y no te esfuerzas demasiado, es posible que veas algunas hermosas estrellas fugaces.

Con información de Vanguardia