CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Aparte de Juan Ramón Collado Mocelo, el abogado de los expresidentes Enrique Peña Nieto y Carlos Salinas de Gortari, las autoridades de Andorra tienen congelada una cuenta en la polémica Banca Privada d’Andorra (BPA), propiedad de su hermana y su cuñado, Lucía Collado y Mario Andrade, a quiénes investiga por blanqueo de capitales, según reveló hoy el diario El País.
En un nuevo reportaje publicado sobre los clientes mexicanos de BPA, el rotativo documentó que la pareja utilizó sociedades de papel en México y Hong Kong para simular operaciones comerciales, con las cuales triangularon 2.87 millones de euros –cerca de 50 millones de pesos-- hacia su cuenta bancaria, en un esquema similar a uno que usó Collado para depositar más de 7 millones de dólares a su cuenta.
Aparte, las autoridades andorranas se percataron que la pareja recibió una transferencia de 247 mil dólares desde una sociedad panameña de Joan Marc Masson, el primer responsable de BPA en México.
De acuerdo con el reportaje, los analistas de BPA se referían a Andrade como “hombre de confianza de Juan Ramón Collado, cliente VIP del banco”, quién había indicado ganar 40 mil 678 dólares mensuales como colaborador del despacho Collado & Asociados –es decir, cerca de un millón de pesos-- y que ingresaba otros 5 mil euros –100 mil pesos-- de la polémica empresa queretana Libertad Servicios Financieros.
Hasta su detención y su posterior encarcelamiento, el 9 de julio de 2019, Juan Ramón Collado era presidente de Libertad Servicios Financieros; según la denuncia que interpuso el empresario Sergio Hugo Bustamante contra Collado –la cual desembocó en su arresto, por fraude inmobiliario--, el abogado de Peña Nieto utilizó la sociedad para lavar millones de pesos en efectivo, entre otros para el expresidente y otros poderosos políticos, como el exgobernador de Querétaro, Francisco Domínguez Servién.
Según El País, las autoridades de Andorra descubrieron que, al igual que el abogado, Lucía Collado y Mario Andrade enviaron dinero a la BPA a través de las casas de cambio Tiber –del banquero Carlos Djemal Nehmad, ahora preso en Estados Unidos-- y por la sociedad fiduciaria Grupo Fidemont, usados en la BPA para imposibilitar el rastreo del dinero de varios clientes mexicanos.
Juan Ramón Collado, por ejemplo, canalizó 90 millones de euros hacia sus cuentas de la BPA a través de casas de cambio.
Con información de Proceso